La autenticidad de algunos documentos legales y en general, cualquier tipo de documento se determina mediante el uso de la firma manuscrita ya que ni siquiera sirve una fotocopia de la misma. Para que los documentos enviados de forma digital tengan la misma validez que un documento firmado a mano se crea la firma digital. Es un método criptográfico que asocia una identidad ya sea de una persona en particular o de un equipo a un mensaje enviado a través de transmisión por la red. Su uso puede ser diferente dependiendo de lo que queramos hacer con la firma ya que tendremos posibilidad de validar que el documento es emitido por nosotros, expresar conformidad con algún documento de tipo legal como podría ser la firma de un contrato laboral e incluso asegurar que no podrá modificarse el contenido del mensaje. La firma digital nos permitirá tener más seguridad a la hora de emitir un documento de manera íntegra a través de su sitio web. La firma digital es el resultado de aplicar a un documento, en línea, un procedimiento matemático que requiere datos que exclusivamente conoce la persona que firma, encontrándose ésta bajo su absoluto control. Con la firma digital debe cumplirse que el receptor debe ser capaz de verificar la identidad del sujeto transmisor. El transmisor no puede rechazar el contenido del mensaje que ha expedido. El receptor no deber ser capaz de poder construir el mensaje el mismo. Estas normas podríamos verlas por ejemplo en el caso de un banco donde se debe cumplir la primera regla donde un usuario accede a un cajero automático, donde el banco tiene que asegurarse que es su cliente.
La otra medida se aplicaría para proteger al banco del fraude donde un cliente si pide una operación a realizar luego no puede negarla; adicionalmente se aplica para proteger al cliente en el caso de que el banco trate de falsificar un mensaje firmado por el cliente donde por ejemplo solicite una operación de sustracción de un importe y el banco diga otra.
La firma digital debe ser susceptible a verificación por terceras partes, de manera tal que dicha verificación permita, simultáneamente, identificar al firmante y detectar cualquier cambio al documento digital posterior a su firma. Podemos mencionar también que la firma digital tendrá idéntica validez y eficacia a la firma manuscrita, siempre que esté debidamente autenticada por claves u otros procedimientos seguros de acuerdo a la tecnología informática. Es necesario una autoridad certificadora que regule y valide la firma digital, en los sitios de comercio electrónico es fundamental contar con un certificado SSL para poder brindar seguridad a sus clientes.